De viatge amb el T-10 de la Bòbila

T-10 és el club de lectura de la Biblioteca la Bòbila que us ofereix plaer i coneixement a partir d'un viatge literari organitzat en deu etapes. L’itinerari del “Club de lectura T-10” combina lectures, tertúlies, còmics, butlletins, xerrades o pel·lícules. És una proposta de 10 excursions lectores, 10 mirades diferents del lloc.

Després dels viatges literaris que hem fet a la ciutat de Nova York, a l'Europa Central, també anomenada Mitteleuropa i a Rússia, al peculiar humor anglès; o a les illes literàries, ens dirigim a la frontera i saltem a banda i banda..., entrem en el cor de la família, a la novel·la llatinoamericana actual, a la part fosca de França a la ciència-ficció,Infància i l'adolescència. I ara, Al marge: la mirada de l'outsider. Ens acompanyes?

dimecres, 16 de gener del 2019 0 comentaris

Leonardo Padura

Leonardo Padura a casa seva, a La Havana
A propòsit de Padura, pensem que fragments de l'entrevista que va concedir a la secció Gentleman del diari El Confidencial,arran del del V Congreso Internacional de Arquitectura y Sociedad (Pamplona), on va ser un dels convidats estrella, ens donen una bona perspectiva del seu punt de vista sobre l'escriptura i sobre la vida.


 Leonardo de la Caridad Padura…
Sí, lo de Caridad es porque mis padres eran devotos de la Virgen de la Caridad del Cobre, la patrona de Cuba, y yo fui su primer hijo. En Cuba, Caridad es nombre masculino.

En este contexto de estudios sobre ciudades que ha venido a inaugurar, describa La Habana, donde usted nació, un lugar diferente a cualquier otro y omnipresente en su obra…

Alejo Carpentier dijo que La Habana era una ciudad que tenía la belleza y el estilo de las cosas que no tienen estilo. Es una ciudad completamente ecléctica, con un nivel grande de deterioro físico y espiritual, y hoy una parte de esa belleza de La Habana está oculta bajo muchas capas de churre, polvo y desidia.

Estudió Literatura Latinoamericana. ¿Qué descubrimientos autorales ha hecho en los últimos tiempos tanto allí como a este lado del Atlántico?
Siempre descubro escritores, porque uno no lee solo a los autores que conoce y ama –lo que no deja de ser un proceso gratificante pero rutinario en la lectura, y mucho más en la escritura–, pero la verdad es que nada me ha conmovido demasiado como propuesta nueva en los últimos años.

Ensayista, escritor, periodista, guionista, novelista… ¿Qué porcentaje hay de cada en Leonardo de la Caridad Padura?
Soy cien por cien cada una de esas cosas y haciendo cada una de esas actividades, aunque a mí lo que me gusta es escribir novelas. Pero el periodismo fue la profesión de la que viví durante 15 años.

Es usted uno de los grandes de la novela policial latinoamericana, con títulos como ‘Pasado perfecto’, ‘Vientos de cuaresma’, ‘La cola de la serpiente’ o ‘Adiós, Hemingway’. Ha sido traducido a muchos idiomas y tiene 24 premios en su haber. ¿Cuál aprecia especialmente?
Hace varios años me dieron el premio Puerta de Espejos, que otorgaba la Biblioteca Nacional de La Habana. Es un premio que dan los lectores a través del número de veces que piden el libro de un autor determinado, y durante varios años los míos habían sido los más solicitados en esa biblioteca.

¿Cómo está la isla desde que llegó Donald Trump? ¿Se ha parado la máquina transformadora del país?
No, 'Tromp' (así suena con acento cubano) no ha tenido la culpa de nada, porque la máquina transformadora de la isla es más lenta desde hace mucho tiempo. Lo que se ha notado con él, además de la retórica, que ha vuelto a tener los niveles habituales de agresividad, ha sido que ha disminuido el número de americanos que llegan a la isla y el de cubanos que van a Estados Unidos.

¿Pero en qué ha cambiado la sociedad cubana –que usted tan bien describe en su obra– en los últimos 20 años?
Aparentemente en Cuba no cambia nada, lo que pasa es que las connotaciones de los cambios dependen de cómo afecten a cada persona. Antes los cubanos no podían viajar al extranjero, no podían tener celular… Ahora los jóvenes cubanos, bien que con mucha dificultad, hasta están en Facebook.

España está muy presente en su última novela. ¿Qué ciudad le resulta más vivible a alguien como usted: Madrid, que visita con mucha frecuencia, o La Habana, independientemente de sus obvias y enormes diferencias?
Madrid me encanta, pero los códigos de Madrid y la forma de vivir allí no son comparables a los de La Habana. Es como comparar un cohete con un destornillador.

¿En qué ciudad viviría que no fuera La Habana?
Cayo Hueso. Estás en el Caribe, en los Estados Unidos, pero fuera de Estados Unidos. Es un lugar donde se respira libertad. Puedes andar desnudo si te apetece, y la gente ni te mira. Las gallinas cruzan la calle y los automóviles se detienen para dejarlas pasar.

¿Hasta qué punto es importante el papel de la ciudad en su obra?
Es un personaje más de mis novelas, no solo en el ámbito físico, también en el espiritual. Por eso tiene categoría de personaje.

¿Cuál es su rincón favorito de La Habana?
Sin duda, mi casa, el lugar donde nací y donde he vivido mis 62 años, y que es por tanto un enorme almacén de recuerdos y de libros.

¿Y fuera de casa?
En la playa. La playa del Caribe es una experiencia inigualable. No hay nada como eso.

¿Su rincón favorito del mundo?
Creta nos encanta a mi esposa y a mi. Lombardía, La Toscana. Y en Andalucía me siento como en casa. Los andaluces hablan por los codos y los cubanos por los codos y las rodillas. Por eso me encuentro en mi ambiente.

¿En qué estado ve la novela policiaca en estos tiempos que vivimos?
Creo que está pasando por uno de sus mejores momentos, porque es cada vez menos policiaca y cada vez más novela, y eso hace que tenga grandes niveles de penetración social. Este es un proceso que comenzó hace 30 años con autores como Vázquez Montalbán o Rubén Fonseca, y nosotros somos beneficiarios de la ruptura que lograron esos escritores, que por lo general pertenecían a la periferia.


dilluns, 7 de gener del 2019 0 comentaris

La neblina del ayer, de Leonardo Padura


El proper dimecres 16 de gener, a les 18h, llegirem La neblina del ayer, de Leonardo Padura. 

La sèrie de Mario Conde está composta per vuit novel·les, La neblina del ayer n'és la sisena i transcorre l’any 2003, 14 anys després de les primeres quatre.
En aquesta entrega, Mario Conde ha deixat la Policia i treballa com a venedor de llibres usats, doncs és un enamorat de la literatura. Entra a una casa a preguntar si tenen llibres en venda i els amos, dos germans – un home i una dona grans - li diuen que si. Conde gairebé embogeix quan hi troba una biblioteca que té llibres que ara són caríssims. S’enduu uns quants, els que pot pagar en aquell moment, i queda en tornar amb el seu soci per a comprar-ne més.D’entre els llibres que s’emporta hi ha un vell receptari de cuina cubana de principis del segle XX molt conegut i buscat. En fullejar el receptari, cau de les seves pàgines un retall d’un diari anterior a la Revolució, que hi porta més de 40 anys dintre del llibre. És la notícia que una cantant de boleros anomenada Violeta del Rio, coneguda com La Dama de la Nit, renunciava a la seva carrera just en el cim de la seva popularitat.
Amant de les causes perdudes i trasbalsat per la bellesa de la cantant, que ni tan sols coneixia, s’hi posa a investigar qui era, si encara viu, per què va renunciar a la seva carrera i per què hi era aquell retall a la biblioteca.
El Conde visita a vells periodistes d’aquells anys, a especialistes en música cubana, fins i tot aconsegueix l’únic senzill que va gravar la cantant – de la veu de la qual també s’enamora – i a poc a poc va muntant el trencaclosques d’un cas complex i truculent que va succeir més de quatre dècades enrere.
Edició cubana
Per a complicar encara més les coses, apareix mort un dels propietaris de la biblioteca i els principals sospitosos són Mario conde i el seu soci, llavors per una banda ha de resoldre el cas que l’obsessiona i per una altra el recent assassinat, per a demostrar la seva innocència.
La novel·la està dividida en dues parts: «Lado A: Vete de mí», i «Lado B: Me recordarás», que són dos coneguts boleros cubans i també les dues úniques cançons interpretades per Violeta del Río en el seu únic senzill.

Lectura molt recomanable, es gaudeix doblement tant per la trama impecable com pel panorama cultural cubà que Padura ens presenta : bibliogràfic, musical i literari ; així com les seves reflexions a propòsit de les estratègies per (sobre)viure que fan servir la gent, en el dia a dia de la illa.