L’inici de la seva carrera d’escriptor comença en publicar “Piazza Italia” el 1975. Va morir a Lisboa el 2012 als 68 anys, després d’una llarga malaltia.
"Mi primer fogonazo con Tabucchi fue Donna de Porto Pim, [que] fue un flechazo que me hizo viajar a las Azores y sentir ese aroma oceánico y colonial que respira la narrativa entrecortada como un vaho invernal a tabaco y soledad de Tabucchi.
También su traducción de Fernando Pessoa al italiano, Una sola moltitudine, resulta conmovedora pues Tabucchi no fue sino un viajero perdido y encontrado muchas veces en esos prodigios de la heteronimia. ...Tabucchi y Lisboa es como un juego del revés (Il gioco del rovescio), como el título de uno de sus libros. Una desaparición en la niebla y en la saudade, una partida de cartas astrales que nunca tendrá fin. Todavía recuerdo la mueca de fastidio de José Saramago cuando en una entrevista a mediados de los 90 le pregunté por ese escritor italiano que se atrevía a crear en portugués dos de las mejores “novelas portuguesas” del fin de siglo: Réquiem y Sostiene Pereira. La mueca de desagrado sirve todavía hoy para hacer valer la repulsa hacia aquel intruso que, amparándose en su amistad de traductor-traidor, lograba ejercer su peculiar devoción y mitomanía: devolver a su autor, devolver al creador de Ricardo Reis y Álvaro de Campos, la inspiración viajera, la pista literaria que le había siempre hechizado como a un alumno aventajado.
¿No son acaso muchos los hijos de Rimbaud, Joyce y Kafka? Nadie como Tabucchi sin embargo ha logrado consumar el juego del extranjero: escribir en otra patria distinta, morir al lado de su padre literario.
Confieso que desde prácticamente esas novelas portuguesas, a la que añadiré La cabeza perdida de Damasceno Monteiro, perdí un poco la pista de Antonio, pero siempre recordaré como un estremecimiento aquella llegada al mercado italiano de un nuevo título suyo cuando ya su dimensión se hizo más grande y más comercial y pasó de Sellerio y de las dulzuras de la periferia al encuentro con un público grande y exigente como es normal en un autor de la escudería Feltrinelli. Por ahí andan, algunos dedicados, títulos que todavía me hacen suspirar en su brevedad y su ironía, en su fondo amargo de café lisboeta como Il filo dell´orizzonte o los inolvidable cuentos de Piccoli equivoci senza importanza.
Aquel Tabucchi todavía italiano, todavía aprendiz de brujo lisboeta, me sigue guiando. Él fue también, a su modo, un eterno viajero: el que perdió los trenes de Madrás y vio surcar los cargueros de Génova, el que luego recuperó sus muebles y sus trajes en una consigna de la estación de Santa Apolonia, allí donde las sacas de correo contienen múltiples fados todavía por cantar en una taberna sin nombre de Alfama."
Fragments extrets de: Reboiras, R. Antonio Tabucchi. Una sola multitud. A: "Letras". Dins: Fronterad: revista digital (03/04/2012) <http://www.fronterad.com/?q=antonio-tabucchi-sola-multitud>
2 comentaris:
Melodia para morenas - articulo de Gabriel Martínez - 01.03.2008
http://elpais.com/diario/2008/03/01/babelia/1204331963_850215.html
Magnífic article, Carme. Gràcies!
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